Últimamente estoy haciendo bastantes sesiones de retrato. La mayoría de modelos no tienen experiencia en el posado, y esto me sirve de pretexto para hablar de Laura.
Laura
no había hecho esto nunca. Alguna vez tenía que ser la primera. Solo
hacen falta dos cosas: la decisión para posar, y la ACTITUD.
Con
esto quiero decir que no importa la experiencia, ni siquiera saber cómo
ponerse. Lo que cuenta es la mirada, y la confianza en que saldrá bien.
Resulta sorprendente cómo algunas personas se "transforman" al colocarse
frente a una cámara y gesticulan como si un ente los poseyera.
Hay que relajarse, confiar en la profesionalidad del fotógrafo, y así las cosas salen rodadas.
Una vez superado el nerviosismo (lógico) inicial, y teniendo claro qué tipo de fotografía vamos a realizar, toca relajarse y disfrutar.
La sesión fue como la seda, y conseguimos una serie bastante buena. Lo más difícil era conseguir una buena iluminación en el espacio disponible. Nos las ingeniamos mezclando teoría con experiencia y con imaginación, menudo cóctel.
Los ojos son el reflejo del esquema utilizado. Personalmente, me encanta el efecto: queda como una "mariposa". (Puedes agrandar la imagen pulsando en ella).
Para el procesado opté por una escala de grises con un virado bastante ligero. Le otorga un aire cálido que me gusta.
Si quieres saber cómo iluminar estas sesiones, o tienes cualquier duda sobre el procesado de estas fotografías, puedes ponerte en contacto en los comentarios.
Laura, gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario